Lo mejor de los nuevos AirPods Pro son los auriculares extra pequeños

Los AirPods Pro de la primera generación eran excelentes, pero incluso con la punta más pequeña, se salían de mis oídos cada vez que me movía o no mantenía las orejas quietas (en ese momento). A lo largo de la conversación, fui ajustando el volumen de mis auriculares Zoom, mientras masticaba, accidentalmente extravié la generación anterior de AirPods Pro, mientras corría, tenía que moverme constantemente.

El problema no supuso un problema, los AirPods Pro estaban siempre en mis oídos, los cambios en los AirPods Pro fueron una molestia, pero aprendí a vivir con ellos.

Después de actualizar a la segunda versión de los AirPods Pro, descubrí que las puntas de los auriculares extraplanas eran mi elemento menos favorito de los nuevos auriculares, los cambios en la duración de la batería del dispositivo, la cancelación de ruido y el estuche de carga eran más interesantes, cuando compré los auriculares, no compré las almohadillas para orejas extra pequeñas. Probé las que estaban en el medio.

Después de usarlos durante unos días, empecé a tener problemas de ajuste similares a los que tuve con la generación original de Pros, se seguían cayendo, como era de esperar (y porque me quedé con la punta mediana por pura pereza). No creí que las puntas extrafinas fueran a servir de nada en esta situación, los AirPods Pro tienen un ajuste mejorado respecto a los modelos anteriores.

Ya no es un juego de “¿cuántas veces me puedo pinchar las orejas?” cuando hago videollamadas. No tengo que preocuparme de que se me caigan los auriculares mientras cuando corro.

Después de usar los AirPods Pro durante un mes, las almohadillas más pequeñas se han convertido en mi nueva característica favorita. Dado que Apple afirma que las almohadillas “han sido creadas exclusivamente para su generación de AirPods Pro”, el método más conveniente para adquirirlas es comprar un par nuevo de los auriculares de segunda generación por el precio de 249 dólares.

No se puede creer lo drásticamente que se ha modificado un detalle aparentemente insignificante, pero las mejoras han hecho que los Pros de segunda generación merezcan el precio de compra.