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Ver mejores ofertasLa prestación de servicios y equipos de SpaceX Starlink al gobierno ucraniano convierte a Elon Musk, la persona más rica del mundo, en un objetivo para el gobierno de Estados Unidos. Esta semana, la Casa Blanca se ha opuesto a las acusaciones de que funcionarios de la administración Biden estaban estudiando la posibilidad de llevar a cabo revisiones de seguridad nacional sobre algunas de las empresas del ex vicepresidente.
Según un informe de Bloomberg, las recientes declaraciones de Musk, en particular su afirmación de que SpaceX no podría seguir suministrando y apoyando a Starlink en Ucrania, han asustado a los funcionarios de Estados Unidos.
Musk declaró que la prestación de servicios de Starlink a Ucrania para mantener el acceso a Internet a pesar de la agresión rusa ha costado a la empresa 80 millones de dólares hasta este momento y muy probablemente se acercaría a los 100 millones de dólares a finales de año. Además, ha declarado que SpaceX ha tenido que construir, lanzar, mantener y rellenar satélites y estaciones terrestres, además de pagar a las telecos por las pasarelas de Internet, lo que ha supuesto un coste mensual cercano a los 20 millones de dólares. Musk ha declarado que los terminales utilizan cien veces más datos que las viviendas.
Musk cambió su postura y declaró que SpaceX seguiría patrocinando Starlink en Ucrania “indefinidamente”.
Estados Unidos se alarmó por la postura pro-rusa de Musk. Entonces publicó una encuesta en Twitter, en la que preguntaba a sus más de 107 millones de seguidores si estaban a favor de su plan de paz, que proponía anexionar Crimea a Rusia mientras se permitía a Ucrania mantener su neutralidad. Políticos como Volodymyr Zelensky fueron algunos de los que expresaron su oposición. Musk desmintió las afirmaciones de que él y Putin habían abordado el tema del empleo de armas nucleares en Ucrania.
El drama que es Twitter. La queja del gobierno de Estados Unidos no se refería tanto a su propiedad de la plataforma como a los inversores extranjeros que financiaron la compra. Binance Holdings, el príncipe saudí Alwaleed bin Talal y el fondo soberano de Qatar son algunos ejemplos de los implicados. Según Bloomberg, el CFIUS podría investigar la propuesta de adquisición de Twitter por posibles amenazas a la seguridad nacional.
Por el momento, las revisiones de seguridad nacional de las empresas privadas de Musk no están siendo realizadas por la Casa Blanca.
“Informes falsos. Eso tendrá que ser. Contrariamente a la creencia popular, la revisión de seguridad nacional “La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, compartió su opinión sobre los informes con CNET.
Twitter ha respondido a los informes de que Musk reducirá la plantilla de la compañía en un 75% una vez que asuma el control de la empresa. “No tenemos ninguna confirmación de los planes del comprador después del cierre y aconsejamos no seguir los rumores o documentos filtrados, sino esperar los hechos de nosotros y del comprador directamente”, decía el comunicado. “No tenemos ninguna confirmación de los planes del comprador tras el cierre”.