Análisis de la AKASO Brave 8, la nueva cámara de acción de gama media

Diseño

La AKASO Brave 8 es una cámara de acción de gama media que cuenta con unas especificaciones muy buenas para su precio: tiene dos pantallas a color, tiempo de grabación ilimitado, graba a 4K 60fps y es resistente al agua hasta 10 metros sin carcasa de protección.

La primera sorpresa nos la encontramos al abrir la caja; vienen un montón de accesorios incluidos. Algo poco habitual y que normalmente tenemos que comprar a parte. Entre lo incluido tenemos:

• La cámara Brave 8
• Un marco para sujetar la cámara
• Un mando a distancia con una correa para la muñeca
• 2 baterías
• Cargador para 2 baterías de 1550 mAh (un poco más grande que en la AKASO Brave 7)
• Cable USB-C
• 8 soportes diferentes
• Tiras de velcro y correas de sujeción
• Paño para limpiar el objetivo
• Guía de inicio rápido (el manual de instrucciones completo se puede ver online)

Como es habitual en las cámaras de acción, tiene una forma muy parecida a la mayoría de las cámaras de acción. Eso sí, es bastante más pequeña que la GoPro 9 y la GoPro 10. De hecho, es un poco más pequeña incluso que la GoPro 8. También es muy ligera y pesa tan solo 115 gramos con la batería. Para que te hagas una idea, la GoPro 10 pesa 153 gramos, un 33% más que las Brave 8.

La parte externa de la carcasa está compuesta de plástico duro y goma. La calidad de construcción es buena, pero está un paso por debajo de las marcas premium.

En la parte trasera tenemos una pantalla táctil de tamaño medio (2 pulgadas) y en la parte frontal tenemos otra pantalla más pequeña (1,22 pulgadas) perfecta para encuadrar selfies. En la parte delantera también tenemos la lente junto con su protector que es reemplazable en caso de que se nos rompa. El protector es muy fácil de quitar y poner, tan solo tenemos que girarlo con la mano haciendo un poco de fuerza. Por supuesto, esto también abre la posibilidad de utilizar filtros ND en la lente directamente, aunque no he visto ninguno a la venta aún.

La sensibilidad de la pantalla táctil es muy buena, ha mejorado respecto a los modelos anteriores y está a la altura o incluso es mejor que en las cámaras GoPro (suele ser un punto débil de GoPro). La interfaz también es ahora más intuitiva a la hora de movernos por los menús y realizar ajustes. Ahora se parece mucho más a la de GoPro y es de agradecer.

Eso sí, la cámara se me ha quedado unas cuantas veces colgada, no respondía, y he tenido que quitar la batería para reiniciarla y poder continuar usándola. Es bastante incómodo, pero es un problema que me ha pasado con casi todas las cámaras que he probado (al menos hasta que depuran el firmware), aunque con la Brave 8 es un poco más frecuente que con otras.

La cámara tiene tres botones, dos en la parte de arriba y uno en el lateral derecho. En el lateral tenemos el botón de Modo y arriba el de encendido y el de grabación. Por supuesto, los botones tienen funciones secundarias:

• Manteniendo pulsado el botón M (Modo) se cambia entre las dos pantallas.
• Una pulsación corta en el botón de encendido sirve para apagar la pantalla y ahorrar batería.

En el lateral izquierdo tenemos una pequeña tapa que protege el puerto USB-C y el compartimento para guardar la tarjeta microSD. En la parte inferior tenemos una tapa más grande donde guardaremos la batería. Las tapas tienen mecanismos que se sienten relativamente robustos, aunque no tanto como la única tapa que tiene la GoPro.

Como podemos ver, en la propia cámara no tenemos ningún mecanismo de fijación (ni sistema GoPro ni rosca de trípode), por eso necesitamos utilizar el marco para colocar la cámara. No es un gran problema, pero es más cómodo que venga integrado porque en muchas ocasiones nos ahorramos tener que cargar con una carcasa. Además, es más cómodo y rápido cambiar la batería o la tarjeta microSD cuando no utilizamos carcasa extra.

Para usar la cámara por primera vez es necesario utilizar la aplicación para el móvil AKASO GO (iOS, Android). No es la mejor experiencia de uso. Te compras la cámara la enciendes para probarla y no puedes porque antes tienes que conectarla con la app móvil y hacerte una cuenta de AKASO. Además, aunque la aplicación ha mejorado, aún no está al nivel de las aplicaciones de las cámaras GoPro e Insta360. Ni a nivel de estabilidad, ni funcionalidad ni estética.

En primer lugar, para conectar la cámara al móvil, la cámara crea una red Wi-Fi a la que nos conectamos con la aplicación móvil. Es un sistema menos cómodo e intuitivo del que usan otros fabricantes. Además, falla bastante y hay veces que la app no encuentra la cámara.

En segundo lugar, editar los vídeos en la app es cómodo, pero el procesado falla bastantes veces y la app queda colgada, perdiendo el trabajo y el tiempo que hayamos dedicado a retocar el clip.

La interfaz de la app ha evolucionado siguiendo la línea de la aplicación de Insta360 y tiene secciones parecidas, aunque tiene que depurarse más.

Además, creo que AKASO debería dejar usar la cámara sin necesidad inicializarla con la app móvil… Y más teniendo en cuenta que su app aún necesita mejorar mucho para cazar a sus rivales.

Por último, me gustaría remarcar un punto importante y es que las pinzas de fijación son diferentes a las típicas de GoPro que utilizan muchísimas cámaras de acción del mercado. Eso hace que muchos accesorios no sean compatibles. Y lo peor es que son prácticamente iguales en funcionamiento, pero tienen una forma ligeramente diferente. Eso sí, la parte del agujero de los accesorios, donde se fijan con la pinza, sí que es igual y es compatible.

Vídeo

Como he mencionado, la AKASO Brave 8 tiene unas especificaciones bastante impresionantes para su precio y muchos modos para elegir:

• Sensor CMOS de ½”
• Lente equiv. 16mm f / 2.5
• El ISO en vídeo es regulable entre 100 y 6400
• Se puede elegir entre Super Gran Angular, Gran Angular, Perspectiva de Retrato, Angulo Estrecho. Yo solo utilizo las 2 primeras porque en retrato y estrecho se nota una pérdida de calidad importante en la imagen.
• En cuanto a códecs de vídeo tenemos H.264 y H.265 con los bitrates High, Medium y Low.
• En cuanto a resoluciones, la Brave 8 es capaz de grabar a:
  • NTSC: 4K30 4:3, 4K60 16:9, 2.7K90 4:3, 2.7K120 16:9, 1440P180, 1080P200
  • PAL: 4K25 4:3, 4K50 16:9, 2.7K75 4:3, 2.7K100 16:9, 1440P150, 1080P200

Además, tenemos 2 niveles de estabilización de imagen: el normal y el SuperSmooth. Sin embargo, en el SuperSmooth no es in-camera, es en la app móvil. Primero debemos pasar el vídeo al móvil y la app procesa el vídeo para realizar la estabilización. El resultado en cuanto estabilización es muchísimo mejor, aunque la imagen se vuelve mucho más suave (perdemos nitidez). Sin embargo, lo peor es que la estabilización SuperSmooth es muy incómoda de usar si hemos grabado muchos vídeos o los vídeos son largos…

Me explico, al pasar vídeos o fotos de la cámara al móvil, primero tenemos que conectar la cámara a la app móvil y no siempre va a la primera. Luego tenemos que navegar hasta los archivos de la cámara y seleccionar los que queremos pasar al móvil. Los vídeos normales y las fotografías se pueden pasar todas a la vez, pero los vídeos con SuperSmooth no, debemos pasarlos de 1 en 1 para que después se haga la estabilización en el móvil. Para uno o dos vídeos sirve, pero si has grabado 30 o 50 vídeos es un sufrimiento.

También hay que aclarar que no todas las configuraciones de vídeo (resolución y fotogramas) tienen estabilización normal, algunas de ellas solo tienen estabilización SuperSmooth. Por ejemplo, a 4K y 60 fps no tenemos la estabilización de imagen normal. A 2,7K a 60 fps sí y a 1080p a 60 fps también.

La calidad de vídeo ha mejorado un poco respecto a la Brave 7. Ahora vamos a ver un ejemplo de 4K en 16:9 y 60 fps con el códec HEVC (H.265) a bitrate alto (80 Mbps) y con el perfil de color normal.

Como podemos ver, el nivel de detalle es bueno, la exposición es correcta, tenemos muy buen rango dinámico y los colores son bastante realistas. Me ha sorprendido gratamente el nivel de nitidez y detalle de la compresión. Las ramas de los árboles y las hiervas del suelo se ven con muy buen nivel de detalle. Sin embargo, al grabar a 4K y 60 FPS perdemos la estabilización digital y la imagen se mueve muchísimo. La cámara solo es usable sin estabilización cuando estamos completamente quietos o cuando movemos la cámara o andamos con mucho cuidado.

En el siguiente vídeo vamos a ver la comparación entre el vídeo anterior (izquierda) y si procesamos con la estabilización SuperSmooth en el móvil (derecha).

El resultado es mucho mejor en cuanto a estabilización de imagen, sin embargo, perdemos muchísimo nivel de detalle y la imagen termina estando muy lavada. Ninguna de los dos vídeos tiene un nivel suficiente desde mi punto de vista.

Afortunadamente, nos queda por ver el modo de estabilización normal. En este caso la grabación es 4K a 30FPS con la estabilización normal (se realiza dentro de la cámara) activada. Al principio veremos un paneo suave mientras andamos y luego corremos un poco para forzar un poco más la estabilización.

Como podemos ver, en general el resultado es mucho mejor. La imagen es bastante estable en general y el nivel de detalle es aceptable. Es un buen punto medio entre los dos vídeos anteriores.

Desde mi punto de vista, solo merece la pena usar el modo de estabilización normal. Sin estabilización el vídeo se mueve demasiado y la estabilización SuperSmooth, además de ser incómoda de usar, deja la imagen con una calidad demasiado baja.

Los modos compatibles con la estabilización normal son:

• 4K (16:9) 30FPS
• 2,7K (16:9) 30FPS
• 2,7K (4:3) 30FPS
• 1440p (4:3) 60FPS
• 1440p (4:3) 30FPS
• 1080p (16:9) 60FPS
• 1080p (16:9) 30FPS

Por tanto, son los únicos modos que recomiendo utilizar. Y como podemos ver, solo hay 2 opciones que graben a 60 fps, el resto son a 30fps lo cual no es idóneo para cámaras de acción.

En cuanto al sonido, ha mejorado mucho, la Brave 7 tenía unos micrófonos malísimos. Con la Brave 8 podemos grabar el sonido ambiente con buena calidad y está casi a la altura de las cámaras GoPro. Sin embargo, la Brave 8 tiene problemas para reducir el ruido producido por el viento, cosa que las GoPro hacen mucho mejor.

En resumen, la calidad de imagen en grabación de vídeo es media. Desde mi punto de vista, la mejor calidad de imagen es a 4K30 con estabilización normal, pero tenemos que mover la cámara relativamente despacio para que la calidad de imagen sea buena.

La estabilización normal funciona relativamente bien para no ser una cámara de una marca grande, pero aun así sigue estando un par de pasos por detrás de la estabilización de GoPro e Insta360. Sirve si vamos caminando con cuidado para intentar mover la cámara lo menos posible, pero la calidad de imagen se resiente mucho si vamos corriendo o si montamos en bici y hay muchas vibraciones. Se nota que intenta estabilizar la imagen, pero no es suficiente y se notan pequeños saltos en la imagen que no quedan bien.

Por último, quería mencionar una novedad importante es que ahora tenemos un menú de configuración del modo vídeo muy completo, parecido al Protune de GoPro.

Aparece cuando deslizamos desde abajo en el modo vídeo y nos permite configurar:

• Resolución y fps
• Estabilización de imagen
• Medida de iluminación central o general
• Compensación
• ISO
• Balance de blancos
• Nitidez
• Bitrate
• Color

Fotografía

La Brave 8 es capaz de tomar fotografías de 48MP o 12MP y, aunque sacar fotos no es la razón principal por la que compraría una cámara de acción, y más con los móviles que tenemos ahora, tampoco está mal tener esta característica en caso de que la necesitemos.

Dentro del modo fotografía podemos sacar fotos, pero también tenemos la función lapso de tiempo o timelapse, para sacar fotografías automáticamente a un intervalo fijo y no las junta en un vídeo, sino que las deja como imágenes para que nosotros podamos crear el vídeo con otro programa o utilizar las fotografías individuales.

Fuera, en el menú de acceso rápido también tenemos la función de temporizador que permite sacar una fotografía después de unos segundos.

Las fotos las podemos sacar en JPEG o en JPEG + RAW y el ISO es variable entre 100 y 3200.

En cuanto a calidad de las fotografías, tienen una calidad realmente buena en cuanto a nitidez y colores. El rango dinámico también es bastante bueno, aunque la cámara no dispone de función HDR para sacar un poco más de rango dinámico en situaciones extremas.

Como podemos ver, los colores son vivos y naturales, sin necesidad de estar sobresaturados. La exposición es buena y tenemos detalle tanto en las sombras como en las zonas de sol. El balance de blancos es correcto y el nivel de detalle es excelente. Creo que la Brave 8 saca fotos mejor que muchos móviles de gama media del mercado.

A continuación, una ampliación de la imagen anterior en el que se puede ver que el nivel de detalle es muy bueno.

Ahora vamos a ver una foto con un rango dinámico un poco mayor. Vemos como la cámara aguanta bastante bien.

Por último, podemos ver como en una foto enfocando directamente al sol, aun retenemos texturas en las zonas de sombra. Algo impresionante para una cámara compacta con un sensor tan pequeño.

En resumen, la calidad de la Brave 8 me ha sorprendido gratamente a la hora de sacar fotografías.

Autonomía

Las baterías de la Brave 8 tienen una capacidad de 1.550 mAh, han aumentado un poco respecto a la Akaso 7, y de media me da para grabar unos 35-40 minutos a 4K con la estabilización normal activada.

La cámara admite la grabación de vídeo ilimitada por lo que no hay que darle a grabar cada ciertos minutos, sin embargo, si he notado que cada 3 GB se genera un nuevo clip por lo que si grabas de continuo tendrás varios clips medianos en lugar de uno grande.

Podemos cargar las baterías en el cargador doble que viene incluido o directamente en la cámara (ambos con cables USB-C).

Conclusiones

La AKASO Brave 8 ha mejorado en muchos puntos a su antecesora. Los menús ahora son más intuitivos y cómodos de utilizar; es más compacta y ligera; la calidad de vídeo y de fotografía también es mejor… Sin embargo, su precio ha aumentado considerablemente.

La Brave 7 salió al mercado por 180 euros y a los pocos meses se podía encontrar fácilmente por 150 euros. La Brave 8 ha salido por 239 euros. Es una subida de precio muy importante porque ahora ya compite con las cámaras GoPro de años anteriores. Por 359 euros podemos encontrar la GoPro 9 sin estrenar y por 250 euros podemos comprar la GoPro 8 de segunda mano.

Y por ese precio creo que no merece la pena ir a por la Brave 8. La GoPro 7 y la 8 ya tienen mejor calidad de imagen que la Brave 8 y una estabilización de imagen mucho mejor. Además, la app de GoPro es mucho mejor.

Está claro que AKASO ofrece un montón de accesorios que valen un dinero, pero muchos de ellos no los voy a usar y otros los tengo repetidos. Preferiría que vendiesen la cámara sola a un precio más competitivo. Además de eso, la Brave 8 tiene puntos importantes que mejorar:

• Estabilización de imagen: aunque ha mejorado, sigue estando bastante por detrás de la estabilización de imagen digital de GoPro, Insta360 o DJI. Sin embargo, hay cámaras antiguas de esas marcas que están al precio de la Brave 8. Además, creo que la publicidad es medianamente engañosa ya que se omite deliberadamente que hay muchos modos de grabación (resoluciones) que no son compatibles con la estabilización de imagen normal.
• Calidad de imagen en vídeo: si bien es cierto que la calidad de imagen ha mejorado, aún tiene camino que recorrer para ser un contendiente en este rango de precios. Además, los ángulos de grabación Retrato y Estrecho son inusables, salen muy pixelados.
• Aplicación móvil: ya que AKASO nos obliga a utilizar la app para inicializar la cámara, creo que deberían tener una aplicación más pulida. Que sea más fácil de usar en el día a día (conectar la cámara al móvil) y que sea más estable.
• Interfaz de la cámara: la interfaz ha mejorado mucho (siguiendo el diseño de GoPro), pero aún hay margen de mejora. Por ejemplo, no le encuentro utilidad a tener un icono de un micrófono en la interfaz de vídeo. El botón sirve para mutear el audio y grabar sin sonido. En mi vida he querido grabar un vídeo sin sonido en una cámara deportiva. Me da exactamente igual. Si no lo quiero se lo quito luego, sin embargo, al estar en la pantalla, hay veces que lo pulso sin querer y grabo el vídeo sin sonido sin darme cuenta.

En resumen, la Brave 8 se comporta en calidad de imagen, micrófono, estabilización de vídeo, etc. como una GoPro 6, pero la competencia ya va por la 10. Por 150 euros, la Brave 8 sería una cámara bastante interesante, pero por 239 euros que cuesta, cuando he hecho la review, no lo es.