Cuando la música es la protagonista de los videojuegos...

Rubén Castro, 4 diciembre 2025
cuando la musica es protagonista del juego

Durante años las bandas sonoras de los videojuegos eran solo eso: bandas sonoras, un eco agradable detrás de la acción del juego. Pero algunos desarrolladores han empezado a ver la música de otra manera. No como relleno, sino como un rol principal. En sus manos, la música no acompaña al juego, sino que es la historia, la emoción, el latido del juego.

Ya sea el murmullo inquietante de un bosque solitario o el crescendo triunfal tras vencer al jefe final, hay desarrolladores que hacen de la música del videojuego una parte inolvidable. No solo diseñan niveles y mecánicas; componen sentimientos.

Música que da cuerpo a la historia

Miremos a Supergiant Games con títulos como Bastion, Transistor y Hades, se han forjado una reputación por crear experiencias narrativas donde la música no solo crea ambiente, sino que es el alma del juego. Darren Korb, su compositor, escribe canciones que transmiten el peso del pasado, el futuro y los conflictos internos de los personajes.

Con un juego de Supergiant no solo juegas: lo sientes, y gran parte de esa emotividad viene directamente de su elemento musical. Por eso, no es de extrañar que los fans busquen las BSO para escucharlas una y otra vez. Si tú también estás escuchando estos álbumes en bucle, utilizar una tarjeta Spotify para reproducir música sin anuncios hace que la experiencia sea aún más fluida.

Música que se funde con el propio juego

Hay desarrolladores como Beat Games (Beat Saber) o Drool (Thumper) que dan la vuelta a la fórmula y convierten la música en el juego. En Beat Saber, cortas bloques brillantes al ritmo de canciones potentes, sincronizando tu cuerpo con los beats como si estuvieras dentro de la música. En Thumper, un juego que se autodefine como “violencia rítmica”, eres un escarabajo espacial que se precipita a través de un paisaje infernal abstracto donde la supervivencia depende de la sincronización rítmica.

Estos juegos no solo son divertidos, también son viscerales. Aprovechan esa satisfacción primitiva de sincronizar el movimiento con la música, exprimiendo al máximo lo que un juego rítmico puede ofrecer.


Desarrolladores independientes que lo clavan

No son solo los grandes estudios. Los desarrolladores indie llevan años dando protagonismo a la música en los videojuegos. Hyper Light Drifter, de Heart Machine, combina combates pixelados con una banda sonora sintética e inquietante que cuenta más de lo que dicen las palabras.

Celeste, de Matt Makes Games, es otra obra maestra. La música de Lena Raine no solo acompaña tu escalada por la montaña, sino que la narra emocionalmente, empujándote en cada salto, caída y reintento.

Estos creadores entienden que el sonido puede comunicar cosas que lo visual no alcanza —ansiedad, esperanza, catarsis— y lo usan para construir viajes emocionales inolvidables.

Los estudios triple-A tampoco se quedan atrás

Incluso los grandes desarrolladores se están sumando a esta tendencia. The Last of Us no sería ni la mitad de devastador sin las cuerdas melancólicas de Gustavo Santaolalla. Red Dead Redemption 2 mezcla los paisajes sonoros dinámicos con los momentos narrativos de forma tan sutil que no notas el cambio hasta que sientes el golpe en el estómago. Y Final Fantasy XIV ha creado toda una base de fans en torno a su música gracias a Masayoshi Soken, que convierte cada enfrentamiento en un espectáculo.

Para estos estudios la música no es algo secundario, sino un pilar fundamental para la construcción del mundo, el ritmo y el peso emocional. Música que se queda contigo

Lo que distingue a estos juegos es que su música perdura mucho después de apagar la consola. Tarareas las melodías, vuelves a revivir escenas en la cabeza o incluso se te saltan las lágrimas escuchando la playlist. Cuando los desarrolladores tratan la música como un personaje principal, la experiencia se vuelve personal.

¿Quieres escuchar esas bandas sonoras de videojuegos sin interrupciones? Una tarjeta de Spotify te facilita disfrutar de la música y apoyar a los compositores que dan vida a los mundos digitales.

Y para todo —desde ofertas de videojuegos hasta música digital— Eneba es el destino definitivo para los jugadores que saben que la música y los videojuegos van de la mano.

Rubén Castro

Redactor

Apasionado de explorar y diseccionar lo último en tecnología. Tengo mucha experiencia en el mundo de los ordenadores y el gaming, aunque también me gustan todos los tipos de gadgets.