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Ver mejores ofertasUn grupo que investiga y denuncia comportamientos poco éticos tanto en el sector privado como en el público ha expresado su preocupación por las operaciones de Apple en el control de dispositivos empresariales.
Según Campaign for Accountability (CfA), Apple se está preparando para poner en aprietos a las empresas con su producto Apple Business Essentials (ABE).
Dado que Apple tiene un control tan firme del entorno de macOS, es posible que no pueda permitir que otros fabricantes ofrezcan servicios de gestión de dispositivos, lo que eliminaría de hecho la competencia.
Apple controla los dispositivos
El líder del sector de la gestión de dispositivos de Apple, Jamf, ofrece asistencia en la instalación y el mantenimiento de flotas de Mac comerciales. Hay 60.000 clientes, tanto grandes como pequeños, que utilizan sus servicios.
En noviembre de 2021, Apple presentó ABE como un servicio adaptado solo a las pequeñas empresas que era compatible con algunas funciones de Jamf.
CfA afirma que Apple aumentará en breve sus operaciones. Los administradores de TI han alegado que Apple está “degradando intencionadamente el funcionamiento” de Jamf, lo que dificulta la distribución de parches de seguridad.
Es posible que los detractores de Jamf discutan si fue inteligente o no construir una empresa sobre la buena voluntad de otra. Según la publicación, Apple no debería confiar demasiado en Jamf porque la empresa fue pionera en el mercado.
Según Michelle Kuppersmith, directora ejecutiva de CfA, “el fuerte control que ejerce Apple sobre las empresas que pueden jugar en su caja de arena implica que podría optar fácilmente por romper o abandonar Jamf”. Apple tiene una política muy estricta sobre qué empresas pueden participar.
A Jamf se le atribuye la creación del negocio de gestión de dispositivos que Apple parece estar dispuesta a asumir, pero todas las ideas e innovaciones de Jamf pueden haber sido en vano si Apple decide darle la vuelta al interruptor.
La organización de vigilancia sostiene que el juego de gestión de dispositivos de Apple forma parte de un patrón más amplio en el que la corporación añade capacidad adicional a su conjunto de productos, al tiempo que utiliza formas agresivas para limitar la funcionalidad de los competidores.
En el informe se mencionan las AirTags. En este caso concreto, se acusa a Apple de causar problemas a los productos de Tile para llamar la atención sobre sus propias ofertas.
Kuppersmith afirmó que está bien documentado que Apple tiene un historial de echar a las aplicaciones de terceros al lanzar nuevos productos con iguales capacidades. En caso de que Apple adopte una estrategia comparable a la de Jamf, las autoridades reguladoras no deberían dudar en tomar medidas.
Tanto Jamf como Apple han optado por no comentar el asunto. Ambas partes se han negado a comentar el asunto.