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Ver mejores ofertasEl mercado de smartphones acaba de registrar su quinto trimestre consecutivo de caída. A principios de este año, supimos que los envíos de teléfonos inteligentes habían caído al punto más bajo observado en una década.
El año pasado fue duro para los fabricantes de teléfonos, que esperaban que los consumidores se cansaran de sus vetustos terminales 4G y dieran paso a un nuevo “superciclo de actualizaciones”. Empresas como Samsung vieron cómo sus beneficios se evaporaban a medida que la baja demanda de dispositivos móviles se traducía también en menores pedidos de NAND, DRAM y otros componentes.
La tendencia a la ralentización de las ventas de smartphones continuó en el primer trimestre de este año, con un descenso interanual del 12%. Curiosamente, los analistas de Canalys creen que el mercado muestra signos de estabilidad incluso cuando informan sobre el quinto trimestre consecutivo en el que se observa una disminución de la demanda de esta categoría de dispositivos. Tal vez sean optimistas respecto a una mejora de la economía en la segunda mitad de este año, como la mayoría de los observadores del sector, pero habrá que esperar para comprobarlo.
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El descenso, dicen, era el resultado esperado de la alta inflación, el cambio de prioridades de los consumidores y el caos general a lo largo de la cadena de suministro. A pesar del exceso de oferta de chips y otros componentes y de las agresivas campañas de marketing, la gente conserva sus teléfonos durante más tiempo y los considera productos básicos que mejoran con cada nueva generación que sale al mercado. Aun así, cada trimestre que pasa aumenta la probabilidad de que algunos consumidores necesiten actualizarse.
Aun así, a Apple y Samsung les fue mejor que a otros vendedores de smartphones. Samsung incluso consiguió mejorar trimestre tras trimestre y hacerse con el 22% del mercado mundial, superando al gigante de Cupertino en el proceso. Dicho esto, las fuertes ventas del iPhone 14 Pro ayudaron a Apple a asegurarse el segundo puesto con una cuota de mercado del 21 por ciento. Luego tenemos a Xiaomi, Oppo y Vivo con el 11 por ciento, 10 por ciento y ocho por ciento de los envíos globales, respectivamente.
Canalys afirma que la mayoría de las marcas están tomando medidas para reducir los inventarios existentes y ajustar su volumen de fabricación para adaptarse a la menor demanda. El ejemplo más claro es Samsung, que ha reducido la producción de chips de memoria hasta que los precios se estabilicen y la demanda vuelva a crecer. Es probable que otros proveedores sigan su ejemplo en los próximos meses.
En general, se trata de una imagen familiar que describe no sólo los teléfonos inteligentes, sino la salud de toda la industria tecnológica. Se espera que el gasto mundial en TI sufra otro golpe en los próximos meses, y las predicciones más optimistas apuntan a una eventual recuperación hacia finales de año.