Análisis de Total War Warhammer III

Tomás de Jesús, 20 octubre 2022

Vale, es cierto que el videojuego Total War Warhammer III lleva bastantes meses disponible, pero no lo he considerado completo hasta que ha salido el modo de juego que todos deseábamos: el mapa de Imperios Inmortales.

Y es que esta tercera entrega es la obra maestra perfecta tanto para los amantes de este mundo de fantasía como de la saga Total War. Por ello, con este análisis quiero que conozcáis mejor por qué, para mí, es casi el juego definitivo tras Total War Warhammer II.

¿Qué es el videojuego Total War Warhammer III?

Para los que (extrañamente) no lo conozcan, Total War Warhammer III es un juego de estrategia ambientado en Warhammer Fantasy, un mundo de fantasía creado por Games Workshop. Básicamente te encontrarás ejércitos de humanos, enanos, elfos, orcos y mucho más peleándose entre ellos.

Se trata de un juego de estrategia por turnos donde deberás expandir tu imperio, desarrollar tecnologías y construir ciudades para conseguir mejores tropas. Pero a parte de gestionar el crecimiento de tu facción, deberás enfrentarte en batallas a tiempo real con todos aquellos oponentes que tienen ese mismo objetivo.

En esta tercera entrega se expande el número de facciones, así como el desarrollo de la historia en general, para dejarnos un pedazo de videojuego al que echarle horas, horas y más horas. Sobre todo ahora, tras unos meses, y la salida del más que indispensable mapa de Imperios Inmortales.

¿Cómo se juega a Total War Warhammer III?

Total War Warhammer III tiene varios estilos de juego, aunque el más utilizado es el modo campaña. De base trae la campaña narrativa de Los Reinos del Caos, donde deberás ponerte al frente de una facción original de este videojuego para conseguir liberar (o no) a Ursun, el dios oso, de las garras de Be’lakor.

En esta campaña deberás capturar territorios, crear una buena economía, desarrollar tecnologías y crear ejércitos poderosos para ir avanzando por el mapa. Y, en cuanto se abran las brechas hacia los reinos del caos, lanzarte de cabeza a ellos para conseguir antes que tus oponentes las almas necesarias para alzarte con la victoria.

La parte de gestión y movimiento en el mapa de campaña es tremendamente adictiva, pero no se quedan atrás las batallas. A pesar de que mucha se pueden resolver automáticamente, dada la disparidad de fuerzas entre ejércitos, otras requerirán que saques tu talento como general.

En una batalla de Total War Warhammer III desplegarás tus tropas antes de que se inicie. Durante ella, podrás mover los bloques en tiempo real, ordenándoles la dirección y los ataques. Liderados por los personajes, estos pueden tener habilidades especiales y hechizos que ayuden durante el combate.

Cada unidad tiene sus atributos, siendo más buenas contra otro determinado tipo de unidad. Es importante conocer tanto tus tropas como las del oponente, eligiendo aquellas en las que puedan salir más indemnes del choque de espadas. Pero, ten cuidado, porque a veces el número es mejor que la calidad.

Total War Warhammer III también tiene un componente de rol, por decirlo así. Tras cada batalla, los personajes ganan experiencia y suben de nivel. Podrás elegir habilidades nuevas para ellos, además de poder equiparlos con armas, armaduras y talismanes que los harán aún más poderosos.

Con la campaña de Imperios Inmortales, por fin podemos disfrutar de un mapa mundial enorme con todas las facciones de los juegos anteriores. Esta es la verdadera experiencia del juego, donde te enfrentarás a un montón de dificultades para sacar adelante a tu imperio. Elijas la facción que elijas, te aseguro que la diversión está asegurada.

Características más destacables

Para resumir un poco todo lo que conlleva Total War Warhammer III, me gustaría destacar aquellas características que lo hacen uno de los juegos más increíbles de este 2022. En serio, si a la entrega anterior le eché más de 200 horas, a este igual las duplicaré.

Gráficos

Cuenta con un motor gráfico muy completo, aunque también requiere de un buen PC para tirar los detalles al máximo. Tanto los escenarios como los modelos están muy currados, además de disponer de animaciones increíbles que harán que desees bajar tu cámara a pie de batalla para disfrutar de las matanzas.

Jugabilidad

Como juego de estrategia, puede ser algo complejo al principio. Cada facción tiene su propio estilo, aunque la base es más o menos la misma. Por lo general, vas a tener que reiniciar varias veces una partida hasta que te hagas bien la idea de cómo funciona dicha facción. Una vez lo consigas, disfrutarás muchísimo.

Historia

La campaña de Reinos del Caos está muy bien hilada, con batallas de aventura y una trama argumental muy interesante. No es que sea el punto fuerte del juego, pero se agradece que el objetivo no siempre sea conquistar y capturar territorios.

Duración

Puede que perfectamente eches unas 40 horas para completar la campaña original del juego con una facción, y seguramente la repitas con otra. Si a eso le sumas la campaña de Reinos Inmortales, con todas las facciones, vas a tener muchísimas horas de diversión. Es un juego muy repetible, vamos, y más aún con las opciones multijugador.

Dificultad

Puedes ponerla a tu gusto, aunque ya os digo que en “normal” se te puede hacer la partida cuesta arriba como no estés avispado en el juego ni familiarizado con la facción. Hay momentos que te puedes frustrar, pero en general es un juego muy agradecido con el estilo de partida que quieras realizar.

Lo bueno y lo malo de Total War Warhammer III

La experiencia de juego siempre será más positiva que negativa, creo yo. Y es que a medida que le metas caña a Total War Warhammer III disfrutarás de todas las cosas buenas que han implementado a lo largo de las tres entregas de este gran videojuego.

  • Puedes jugar con todas las facciones y personajes legendarios de Warhammer Fantasy, cada uno con un estilo y mecánicas diferentes.
  • Te permite jugar una y otra vez sin que te aburras, siempre eligiendo facciones diferentes que te ofrecerán partidas más o menos desafiantes.
  • Capacidad para una campaña multijugador de 8 jugadores, ideal para viciar largo y tendido con tus colegas online.
  • Buena minicampaña a modo de tutorial para familiarizarse con el juego antes de lanzarse a las campañas importantes.
  • Acceso al Workshop de Steam, permitiendo añadir mods para personalizar aún más el juego.

Ahora bien, tampoco se salva de algunas cosas negativas. Por ejemplo, en algunos PC puede que tenga problemas de rendimiento en las batallas, sobre todo cuando se apelotonan demasiadas unidades, modelos y animaciones. Bajar los gráficos es la clave, y justo en opciones tienes la oportunidad de realizar una prueba de rendimiento.

Otra de las cosas que aún no han arreglado, o lo han pasado por alto, son los “Doom Stack”. Se trata de crear ejércitos con las unidades más poderosas de cada facción y que pueden salir victoriosos de las batallas autoresueltas sin ninguna baja. Aquí lo mejor es autoimponerse unas reglas personales, como poder tener X número de unidades del mismo tipo en un ejército como máximo.

Por último, una de las cosas que muchos aborrecemos: los malditos DLC. Y es que Total War Warhammer III es experto en ello. Sí que es cierto que podrás enfrentarte a todas las facciones de esta entrega y de las anteriores durante la campaña, pero te tocará pasar por caja si deseas jugarlas.

Debes comprar las entregas anteriores y sus respectivos DLC en función de qué facción quieres jugar, incluso de algún personaje legendario concreto. Vamos, que si quieres tener todo el contenido desbloqueado, puedes dejarte una pasta. Lo ideal es esperar a que hagan rebajas de Steam y poder adquirir aquellos que más te interesen a un precio reducido.

¿Vale la pena comprarlo?

Si te gusta Warhammer y los juegos de estrategia, es un rotundo sí. En caso de que no hayas jugado a ninguna entrega antes, puede que te cueste un poco hacerte con los controles y las mecánicas, pero tras unas cuantas horas (y la magnífica campaña-tutorial) enseguida le pillarás el gustillo.

Total War Warhammer III es de esos videojuegos al que le puedes echar muchas horas. Se te va a pasar el tiempo volando, diciendo “un turno más” hasta que veas salir el amanecer por la ventana. La cantidad de contenido es espectacular, y gana muchos enteros el tener, por fin, una campaña multijugador para más de 2 jugadores.

Para aquellos que se introduzcan en este tipo de juegos, les recomendaría comenzar por alguna de las entregas anteriores. Adquirirlas en rebajas, que seguro que están bien de precio, y ver cómo funciona. Y es que, si al final das el salto a la tercera entrega, te servirán para desbloquear nuevo contenido.

En definitiva, Total War Warhammer III es el broche final de una serie de juegos de estrategia que, personalmente, han marcado historia. Su capacidad de repetir partidas, que vayan implementando nuevo contenido y mejoras lo hacen uno de los juegos definitivos para perder horas y vida social frente a una pantalla. Pero, oye, lo vas a disfrutar como un enano.

Tomás de Jesús

Redactor

Redactor de contenidos con formación en Relaciones Laborales, Recursos Humanos, Coaching y Mediación, aunque no teme escribir de cualquier otro tema que se le proponga. También ofrece asesoramiento y orientación a través de la metodología de coaching, tanto en el ámbito personal como deportivo, académico y laboral.

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